Champiñones Rockefeller

Lasagna de sartén: el sabor clásico en una versión rápida.

Si eres amante de la lasagna tradicional, pero buscas una forma más rápida y ligera de disfrutarla, la lasagna de sartén es la opción perfecta. Mantiene todo el sabor y la esencia de este platillo clásico, pero sin las complicaciones del horno. Con capas de carne, vegetales frescos y un toque de queso derretido, esta versión es igual de deliciosa, pero mucho más práctica y nutritiva. Además, al prepararla en sartén, puedes ajustar fácilmente los ingredientes para hacerla aún más saludable, agregando más verduras o utilizando proteínas magras. ¡Una opción reconfortante, deliciosa y llena de nutrientes para tus días más ajetreados!

Ingredientes:

• VERDURAS: champiñones (seleccionar los más grandes), cebolla, ajo y espinacas.

• PROTEÍNA DE ORIGEN ANIMAL: queso Oaxaca, acompaña con pechuga de pollo, filete de pescado o carne de res.

• CEREALES SIN GRASA: puedes acompañar con arroz o pasta.

• ACEITES Y GRASAS CON PROTEÍNA: crema light.

• ACEITES Y GRASAS SIN PROTEÍNA: aceite vegetal.

• EXTRAS: condimentos al gusto.

Preparación:

1. Limpia los champiñones y retira los tallos. Sécalos y pincela con aceite de oliva. Reserva.

2. Precalienta un sartén con una cucharadita de aceite vegetal. Agrega la cebolla y ajo, y saltea hasta que esté tierna, pero sin dorarse.

3. Incorpora al sartén las espinacas. Añade también la crema light y el queso Oaxaca, y mezcla hasta que todo se combine muy bien.

4. Rellena los champiñones con la mezcla y colócalos en una charola para hornear, ligeramente rociada con aceite. Hornea a 190°C (375°F) durante 15 a 20 minutos, o hasta que los jugos se liberen en la fuente.

5. Por otro lado, sazona los trozos de pechuga de pollo con que acompañarás tu platillo y ásalos en un sartén precalentado con aceite vegetal.

   
   

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La lasagna de sartén es una opción deliciosa y práctica para disfrutar de un platillo tradicional con un toque moderno y saludable. Con capas de sabor, proteínas y vegetales, es la combinación perfecta entre nutrición y sabor. Lo mejor de todo es que puedes personalizarla con tus ingredientes favoritos y hacerla aún más nutritiva, como agregar espinacas o berenjenas para una dosis extra de fibra. ¡Es un plato que te llena de energía sin complicaciones! Además, su preparación rápida y sin necesidad de horno la convierte en una opción ideal para esos días en los que necesitas algo sabroso y reconfortante sin mucho esfuerzo.

¡Seguro que se convertirá en una de tus recetas favoritas!